La funcionaria federal dijo que para alcanzar el desarrollo se debe apoyar la creación de infraestructura de exportación e importación.

La entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN) en 1994 y los procesos de integración económica en los que formó parte México provocaron una brecha entre el norte y sur del país por lo que se tiene que buscar el desarrollo de esta última a través del mismo comercio exterior, consideró Luz María de la Mora, subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía.

“La integración de México ha pasado por el desarrollo de logística, el desarrollo de infraestructura, el desarrollo de diferentes sectores que si han sido capaz de integrarse a los mercados internacionales y eso ha creado una brecha con los estados del sur”, apuntó la funcionaria federal durante su participación el Congreso Nacional de Agentes Aduanales este jueves en Mérida.

De la Mora apuntó que el principal reto para la nueva administración federal es es desarrollar esta región.

“El reto para nosotros y de ahí el objetivo de desarrollar el sur-sureste. El plan del desarrollo del sur y del sur-sureste del país lo que busca es que cerremos esa brecha que hemos vivido en los últimos 30 años”, indicó.

La funcionaria comentó que un ejemplo de estados de desarrollo en no fronterizos es Guanajuato, ya que esta entidad invirtió para mejorar su infraestructura de exportación y con ello lograr tasas de crecimiento de entre el 5 y 7 por ciento.

“Ustedes saben que estados como Guanajuato, por ejemplo, que era un estado bastante orientado al mercado nacional con poco desarrollo de infraestructura decidió integrarse al comercio internacional en los años 90 y el estado de Guanajuato hoy crece a tasas de 5,6,7 por ciento anual en cambio estados como Chiapas, Oaxaca, Michoacán mantienen tasas de crecimiento del 0 por ciento”, dijo.

La subsecretaria de Comercio Exterior señaló que la manera más recomendable para alcanzar el desarrollo es a través de la creación de infraestructura de exportación e importación y la realización de planes de suministro para garantizar el abasto de insumos y productos para la industria.

“Creemos que el comercio exterior tiene un papel fundamental que jugar porque la herramienta está y necesitamos crear la infraestructura y los planes productivos para poder subirnos a ese ‘carro’ de la integración productiva”.

También agregó que debe considerar aspectos tecnológicos en el desarrollo tecnológico del comercio exterior como la ‘clusterización’ y los trámites digitales.

“En el comercio exterior la entendemos (a la innovación) cómo la forma de que Mexico puede integrarse a la revolución industrial 4.0 cómo podemos llegar a contribuir a crear esas sociedades 5.0 a través de la capacitación y capital humano a través de innovaciones en cadenas de suministros, a través de la clusterización, a través de un comercio sin papel”.

En Yucatán, el gobernador Mauricio Vila Dosal anunció la creación del Polo Tecnológico de Bienestar para recatar la Zona Económica Especial de Progreso que fue cancelada en la actual administración federal y que se consideraba uno clúster de innovación y tecnológico.

En estados del sureste como Quintana Roo y Campeche, el comercio exterior solo representaban el 0.19 y el 0.63 por ciento respectivamente de su producción total del 2017.


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